En los últimos días, la ciudad de Durango ha enfrentado hasta dos cortes de energía eléctrica por semana en distintos sectores, afectando gravemente al pequeño comercio local y a los hogares. Esta situación ha provocado pérdidas económicas significativas y el descontento de los ciudadanos, quienes exigen soluciones inmediatas por parte de las autoridades y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Beatriz Zamora, presidenta de la Cámara Nacional de Comerciantes en Pequeño (Canacope) filial Durango, denunció que los constantes apagones en el Centro Histórico y en las zonas periféricas de la ciudad han generado un impacto negativo tanto en las ventas como en el bienestar de las familias.
«Los apagones en el Centro Histórico significan dinero perdido, y también lo vemos en la periferia. Para las amas de casa, un apagón significa que su mandado se echa a perder. Se me ha acercado gente molesta porque, ¿quién les paga su mandado? Y más en la situación económica que estamos viviendo. En el Centro Histórico, cada 10 minutos sin luz es dinero que perdemos porque no podemos realizar ventas con tarjeta, se nos va la economía, y nadie nos da una solución», señaló Zamora.
Además, resaltó que las ventas han sido bajas en este inicio de año, y los cortes de luz agravan la situación. Según Zamora, los apagones se deben a supuestos actos de robo de electricidad por parte de algunos comerciantes, pero criticó que la CFE aplique medidas que afectan indiscriminadamente a quienes cumplen con sus pagos.
«CFE tiene que ser prudente y sabio. No porque uno tenga un problema nos va a detener a 10. Creo que se debe sancionar a quienes están cometiendo irregularidades, pero respetar y apoyar a los que hacemos las cosas bien, que trabajamos y pagamos nuestras obligaciones. Hay apagones, pérdidas económicas, equipos descompuestos y nadie responde por eso», declaró.
La problemática no solo afecta a los negocios, sino también a los hogares. Las familias ven cómo se descomponen sus alimentos y aparatos electrónicos sin que haya alguna compensación o respuesta por parte de las autoridades.
«Es una situación que se debe atender con urgencia», concluyó Zamora, haciendo un llamado a la CFE y al gobierno local para implementar soluciones que garanticen el suministro de energía eléctrica y reduzcan el impacto económico en los sectores afectados.
Mientras tanto, comerciantes y ciudadanos esperan respuestas concretas ante un problema que no solo afecta su economía, sino también su calidad de vida.