Durango, Dgo.- Job Ibarra Gaytán, un joven docente de 23 años de edad, ha trabajado durante cinco meses sin recibir su salario debido a la burocracia en la Secretaría de Educación del Estado de Durango (SEED).
Job, originario de Lerdo, egresó el verano pasado del Instituto de Estudios Superiores de Educación Normal General Lázaro Cárdenas del Río. Tras presentar el examen correspondiente, obtuvo una plaza docente en la primaria Profesor Benigno Montoya de la Cruz, ubicada en la colonia Asentamientos Humanos de la capital duranguense, donde comenzó a laborar el 1 de septiembre.
Con la expectativa de recibir su primer pago el 15 de octubre, se encontró con la sorpresa de que su salario no fue depositado debido a un error en Recursos Humanos de la SEED: la clave de su plaza seguía asignada a la maestra anterior, quien cobró la quincena del 15 de septiembre. La solución implicaba que la docente reintegrara el dinero y que se completaran los trámites administrativos, lo que tardaría al menos un mes más.
El problema se prolongó y, para la quincena del 15 de noviembre, tampoco recibió su sueldo, esta vez bajo el argumento de cambios en las subsecretarías y en otros puestos de la dependencia. La situación se agravó en diciembre, cuando la prioridad fue el pago de prestaciones de fin de año, dejando nuevamente a Job sin su salario.
A pesar de ello, el joven regresó a clases en enero con la esperanza de que su situación se regularizara, pero nuevamente el 15 de ese mes su pago no fue programado debido a que su alta no había sido completada. Hoy, 30 de enero, enfrenta la misma situación, sin recibir remuneración alguna por su trabajo.
Job manifiesta su preocupación, ya que debe cubrir gastos de renta, servicios y alimentación en una ciudad distinta a su lugar de origen. A pesar de su vocación por la docencia, su situación económica se ha vuelto insostenible. Por ello, hace un llamado a las autoridades correspondientes para que intervengan y agilicen los trámites necesarios para recibir el salario que le corresponde.