* El próximo miércoles 26 de marzo revisarán avances del pliego petitorio, incluida la demanda de vivienda de 400 familias
* Hogares de adobe y madera de fresnillenses, son reflejo de la desigualdad social y deben mejorarse mediante programas del gobierno
Fresnilllo, Zac.- Más de 400 familias en situación de pobreza del municipio de Fresnillo, se dicen dispuestas a continuar la lucha para que el gobierno las incluya en los programas de mejoramiento a la vivienda, se trata de ciudadanos que el año 2019 entregaron su expediente en la Secretaría del Bienestar donde les dijeron se harían los estudios socioeconómicos, sin que a la fecha sean atendidas.
Ante la negativa, la misma solicitud fue llevada de forma individual (como se indicó, por la nueva política), a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ordenamiento Territorial (Seduvot), sumando alrededor de tres mil personas de distintos municipios donde iban incluidos los expedientes de los fresnillenses, pero hubo poco avance.
El líder antorchista Guillermo Guerrero Viramontes ha documentado la pobreza en que viven centenas de sus agremiados, que llevarán su demanda ante el gobierno municipal el próximo miércoles 26 de marzo para dar continuidad a la lucha por vivienda y otras demandas sociales ante el alcalde Javier Torres.
Los interesados han evidenciado las condiciones de los hogares de decenas de fresnillenses, entre ellos la familia de la señora Alejandra Saucedo, oriunda de La Quemada, que hace un llamado a la autoridad para que les apoye con láminas, montenes y cemento para reforzar los viejos cuartos donde pasan su vida.
También han mostrado fotografías de las viviendas improvisadas en colonias como Alianza Ciudadana y La Fe de la cabecera municipal, donde fresnillenses se resguardan de las inclemencias del tiempo con hule negro, lonas y madera.
Los afectados justifican su petición, porque el salario alcanza apenas para la alimentación y no pueden destinarlo a las mejoras de sus hogares, anticipando que la llegada de las lluvias ablanda el adobe y la madera representando un peligro para la integridad física, además del frío y humedad que provocan enfermedades respiratorias.