Durango, Dgo. – Para miles de familias en Durango, el dinero que les envían sus seres queridos desde Estados Unidos es un salvavidas. Sin embargo, ese apoyo económico ahora está en peligro debido al nuevo impuesto que el gobierno del presidente Donald Trump aplicará a las remesas, afectando directamente a 1 de cada 10 hogares duranguenses que dependen de estos recursos.
Raúl Montelongo Nevárez, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) en Durango, alertó que muchas familias apenas logran cubrir sus necesidades básicas con lo que reciben. «No es un lujo, es el dinero para la comida, la renta o los útiles de los niños. Si esas remesas se reducen, el sufrimiento será inmediato», explicó.
Ante el cobro del impuesto, muchos migrantes buscarán formas alternativas para enviar dinero, pero Montelongo advirtió que esto podría traer riesgos: «Si recurren a canales informales, el dinero podría perderse o llegar con demora, dejando a las familias en una situación aún más difícil».
Doña María, una madre duranguense que recibe ayuda de su hijo en Texas, compartió su preocupación: «Con lo que me manda, pago la luz, el agua y algo para la despensa. Si le quitan más, no sé cómo le haremos».
El impacto no solo será en los hogares. Sergio Sánchez López, líder de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), explicó que cuando las familias reciben menos remesas, gastan menos en tiendas locales, mercados y servicios. «Esto podría significar menos ventas para los negocios y, en el peor de los casos, despidos», señaló.
Aunque México recibió un récord de 64 mil 745 millones de dólares en remesas en 2024, el futuro es incierto para Durango. Mientras las familias esperan noticias de sus seres queridos en EE.UU., el temor crece: ¿Podrán seguir mandando la misma ayuda?
Por ahora, la incertidumbre se extiende en los hogares duranguenses que, una vez más, enfrentan los vaivenes de políticas ajenas, pero cuyas consecuencias llegarán directo a su mesa.
