El imperialismo nunca se ha detenido por los valores y los derechos humanos; y menos ahora que necesitan reactivar la economía de sus países en decadencia.
Bombardeos israelíes y bloqueo de ayuda han causado 147 muertes por hambre (88 niños), 40,000 bebés en riesgo y 59,000 mártires en total. La OMS alerta sobre desnutrición masiva, mientras la comunidad internacional no actúa.
Urge que la humanidad encuentre otra forma de organizar la sociedad, que no tenga como objetivo la acumulación de riqueza desmedida que sus dueños nunca se podrán gastar (porque necesitan varías vidas, cosa imposible), para evitar catástrofes como esta.