#Durango // Productores de tomate en Durango y Sinaloa confían en revertir arancel del 21% impuesto por EU

abril 17, 2025

** A pesar del anuncio de Donald Trump, agricultores mexicanos buscan impugnar la medida antes de su entrada en vigor el 14 de julio.

Durango, Dgo. – Aunque el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó el cobro de un arancel del 21% a las exportaciones de tomate mexicano a partir del 14 de julio, productores de Durango y Sinaloa mantienen la esperanza de revertir esta medida en los próximos 90 días.

Luis Caballero Ruiz, productor de agricultura protegida en Durango, explicó que, aunque el gobierno estadounidense lo denomina una «cuota compensatoria», en la práctica funciona como un impuesto adicional. «Hay un plazo para que los equipos jurídicos de los productores impugnen esta decisión», señaló.

Sinaloa, uno de los principales exportadores de tomate a EU, ya enfrenta problemas de seguridad, y esta medida representaría «otro golpe» para su economía. En Durango, aunque la agricultura protegida abarca menos de mil hectáreas, el efecto se extendería a toda la cadena productiva.

Actualmente, el estado cuenta con alrededor de 600 hectáreas de cultivos protegidos, distribuidos entre la capital y la región de La Laguna, además de municipios como Guadalupe Victoria, Nombre de Dios y Poanas, donde operan invernaderos.

El arancel afectaría directamente las ganancias de los agricultores. Una caja de 20 libras (la presentación más consumida en EU) se cotiza actualmente en 10 dólares, pero con el impuesto del 21%, el precio bajaría a 7.90 dólares.

«El productor tendría que trasladar ese costo al consumidor, por lo que el tomate llegaría a 12 dólares en el mercado estadounidense», explicó Caballero Ruiz. Esto, advirtió, reduciría la demanda, ya que los compradores buscarían alternativas más baratas.

Si los productores optan por dejar de exportar, el consumidor mexicano podría beneficiarse con una mayor oferta y precios más bajos. Sin embargo, la industria del tomate enfrentaría graves consecuencias debido a su infraestructura especializada.

«No es como los granos, donde puedes dejar de sembrar. Aquí hay invernaderos, sistemas de riego y personal capacitado. Si esta industria quiebra, se perderá toda una estructura productiva», alertó el agricultor.

Mientras tanto, los productores de tomate en México esperan que las gestiones legales logren detener o modificar esta medida antes de que entre en vigor.