Por:Emilio Rubén Rosas Nieto
Nuestro país, en el que vivimos alrededor de 130 millones de mexicanos, corre peligro ante las amenazas hechas en días pasados por el gobierno de los Estados Unidos y su presidente Donald Trump, pues incluyeron a México junto a Irán, China y Rusia en los países considerados como enemigos, como adversarios del imperialismo. Declararon que no cederán ante las presiones extranjeras, pues, según los gringos —en particular el fiscal general, Pam Bondi—, se atenta contra la salud pública de su país con la “epidemia del fentanilo”. Estas declaraciones son graves y muy delicadas, pues podrían significar la intervención de los norteamericanos en nuestro país. En pocas palabras, México se encuentra en peligro ante tales amenazas.
Mientras el país se encuentra sumido en una severa crisis —pues no hay un sistema de salud digno, educación de calidad, seguridad para las familias y empleo bien remunerado— el partido oficial en el poder, Morena, no atiende estas necesidades de los mexicanos. Y ante las amenazas, brilló por su ausencia frente a la embestida de los Estados Unidos, ya que no hubo una respuesta enérgica ante el ataque. Este es un problema serio, debido a que, en vez de educar y politizar a los mexicanos ante los problemas que ocurren en el país y en el mundo, se mantiene en su postura de entrega de las tarjetas de bienestar, en lugar de tomar una posición firme y hacer el llamado a la población sobre la gravedad de los problemas.
México corre un grave peligro, pues estos son síntomas de que los Estados Unidos buscan apoderarse del territorio mexicano y de todos los recursos naturales que hay en él. Según datos oficiales, de los 200 países que hay en el mundo, nuestro país, México, se encuentra en el número 13 de los que tienen más riqueza. Esto quiere decir que el imperialismo busca apoderarse de todos nuestros diversos ecosistemas, como bosques, selvas y costa, que es extensa y variada, comprendiendo tanto el litoral del Pacífico como el del Golfo de México y el Mar Caribe. Tiene una longitud total de aproximadamente 11,122 km, sin incluir las islas. Esta costa alberga una gran biodiversidad y numerosos asentamientos humanos. Y, aunque ya lo hacen, buscan explotar aún más la fuerza de trabajo de nuestro país, pues en México hay casi 14 millones de trabajadores del sector secundario; es decir, obreros que trabajan en industrias de la transformación de materias primas y de embalaje de partes, y que son quienes generan la riqueza en las fábricas.
Las amenazas que ha hecho el imperialismo no se han detenido desde que el actual presidente llegó al poder, y ha cumplido con las que ya ha hecho, como las deportaciones masivas, los aranceles en las exportaciones mexicanas y clasificar al narcotráfico como una organización terrorista. México es de los mexicanos. Nuestro país, nuestro territorio, es la única riqueza que tenemos, y si no lo defendemos nosotros —los obreros, los estudiantes, las amas de casa, todos los sectores sociales—, nadie más lo hará por nosotros.
Debido a esto, el Movimiento Antorchista Nacional cree necesario alertar a todos los mexicanos y hacer el llamado a toda la población a unirse y organizarse para defender nuestra patria, pues el peligro en el que nos encontramos es muy grande. Buscan reducir nuestra poca independencia y soberanía. Es urgente reducir nuestra dependencia económica y política de los Estados Unidos.
Nuestro país debe ser gobernado por líderes verdaderamente emanados del pueblo trabajador, del pueblo pobre que es explotado y engañado diariamente por las clases dominantes. Por ello, los mexicanos más conscientes debemos tomar las riendas de nuestro país y poner los intereses de la patria por encima de cualquier cosa.
Es urgente formar un partido que verdaderamente se interese por los intereses de la clase trabajadora del país, un partido que vele por los intereses de la nación. Esto se puede lograr solo si el pueblo se sensibiliza y se esfuerza por hacer conciencia, se organiza y lucha, ya que esta es la única salida que tenemos ante las amenazas del imperialismo. Solo entre todos, organizados y educados, se puede sacar al país del agujero negro en el que se encuentra.