El robo de metales como acero, aluminio y cobre ha aumentado en el segundo trimestre de 2025, convirtiéndose en un objetivo prioritario para el crimen organizado. La autopista México-Saltillo (MEX-57D), que conecta la capital del país con Coahuila, concentra el 22% de estos delitos, posicionándose como el tramo más afectado. El 53% de los robos ocurre mientras las unidades están en movimiento, lo que agrava los riesgos logísticos en esta ruta clave para el transporte industrial.
De acuerdo con Luis Enrique Villatoro Martínez, especialista en seguridad logística de la firma Overhaul, el valor creciente de los metales en el mercado internacional y el impacto de los aranceles han incrementado su atractivo para grupos delictivos. Los robos no se limitan a una región específica, sino que abarcan una franja desde el centro hasta el norte del país.
Tres estados concentran el 60% de los casos: Puebla (27%), Guanajuato (20%) y San Luis Potosí (13%), todos con fuerte presencia de crimen organizado. Aunque alimentos y bebidas siguen siendo el tipo de carga más robada (33%), el hurto de metales creció un 3% respecto al trimestre anterior. También se reportan incidentes en Querétaro, Veracruz, Hidalgo, Nuevo León y otras zonas del país.
Los robos se cometen en su mayoría entre miércoles y viernes, entre las 3:00 y las 6:00 horas. Ante este panorama, autoridades y empresas de transporte han reforzado las estrategias de seguridad para mitigar el impacto económico y operativo de estos delitos que afectan directamente la cadena de suministro en México.