#Durango // Apicultores enfrentan crisis: producción de miel se desploma y pérdidas aumentan

noviembre 28, 2024

Gómez Palacio, Durango.- La apicultura en la Región Lagunera de Durango atraviesa una grave crisis económica y ambiental. Con un padrón de 70 apicultores, que abarcan desde veteranos con 40 años de experiencia hasta nuevos productores con apenas un año en el oficio, el sector enfrenta retos que amenazan su continuidad.
En la comunidad de Los Llanos, la última cosecha del año dejó apenas 10 kilogramos de miel por colmena, una cifra alarmantemente baja en comparación con años anteriores, cuando se alcanzaban hasta 70 kilogramos por colmena. Karen Fraire Galindo, apicultora e investigadora de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Juárez del Estado de Durango, explicó que la disminución de la población de abejas y los cambios en las condiciones ambientales han mermado considerablemente la producción de miel.


“La inversión que hacemos no se recupera. Hoy en día apenas logramos cubrir los costos básicos y en algunos casos ni eso. Encontramos colmenas vacías, lo que significa pérdidas irreparables”, señaló Fraire Galindo.
Altos costos y bajas ganancias
El mantenimiento de los apiarios conlleva gastos considerables: combustible, traslado de colmenas, mantenimiento, reposición de reinas y materiales como la cera. Estos costos, que ascienden a miles de pesos por temporada, no se ven reflejados en ganancias. Actualmente, el precio por kilo de miel varía entre 150 y 180 pesos, dependiendo del tipo, siendo la miel de mezquite la más valiosa. Sin embargo, la baja producción y la competencia con miel adulterada —vendida a precios inferiores a 100 pesos por kilo— complican aún más la situación.
“De tres apiarios que trasladamos, solo uno tuvo una producción aceptable. El resto apenas produjo suficiente para mantener a las abejas, y en algunos casos encontramos cajas completamente vacías. Esto refleja un problema estructural que podría llevar a la desaparición de esta actividad”, detalló la apicultora.


Un reto para la sostenibilidad

Además de la producción de miel, la apicultura juega un papel esencial en la conservación del medio ambiente. Fraire Galindo destacó que los apicultores locales no solo enfrentan pérdidas económicas, sino que también luchan por preservar un equilibrio ecológico que depende directamente de la polinización realizada por las abejas.
Sin embargo, los pequeños productores no cuentan con la capacidad suficiente para abastecer las grandes cadenas comerciales, lo que limita su acceso a mercados más amplios. “Las marcas que encontramos en los supermercados no siempre son producto directo de apicultores. En muchos casos, son intermediarios quienes adquieren la miel y la comercializan bajo sus propias marcas”, indicó.
Apoyo urgente para salvar la apicultura


La apicultura en la Región Lagunera requiere de apoyo gubernamental y acciones contundentes para evitar su extinción. Los apicultores locales hacen un llamado a las autoridades para implementar políticas que mitiguen los efectos del cambio climático y regulen la venta de miel adulterada, que desprestigia el trabajo artesanal y amenaza la sostenibilidad del sector.
En una región donde la miel es más que un producto, sino un reflejo de la conexión entre los ecosistemas y la economía local, el rescate de la apicultura es una tarea urgente y necesaria.